"Mi papi me viola, ayudame",
fue la dramática confesión de una niña de 12 años a su tía en Santiago
del Estero, a quien le contó los abusos sexuales a los que era sometida
por su papá. Tras escuchar a la menor, la mujer realizó la denuncia y el
hombre fue detenido. La otra hija -de 7-, admitió a través de Cámara
Gesell que su padre la manoseaba por las noches.
El acusado es un jornalero de 40 años, oriundo de La Banda, quien
comenzó a convertir a sus hijas en esclavas sexuales después de que su
esposa murió. Según trascendió, el hombre, cuya identidad fue reservada, comenzó a someter a su hija adolescente de 12, mientras que la más pequeña estaba en la escuela.
Para encubrir sus abusos, el papá amenazó a la chica para que no le
contara a su hermana, quien también terminaría por confesar que fue
abusada por él. Las sospechas surgieron cuando los familiares comenzaron
a notar que las dos nenas se mostraban deprimidas y tristes, aunque inicialmente creyeron que era por la reciente muerte de la mamá, sin imaginarse nunca el fondo de la historia.
Consternada por lo que le contó su sobrina, la tía acudió
inmediatamente a la Justicia y realizó la denuncia. A través de la
Cámara Gesell, ambas hijas contaron con detalle los abusos que recibían
por las noches. Una vez comprobadas las violaciones, el hombre fue
imputado ayer por "abuso sexual con acceso carnal" y "abuso simple", agravado por su condición de padre.
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