Hoy os traemos otro caso que demuestra que la desgracia siempre está presente, incluso en el lugar menos esperado. Hace aproximadamente una semana, una mujer descubrió que había grabado de casualidad el momento en que un hombre se estaba ahogando, mientras hojeaba tranquilamente las fotos de su viaje a una famosa y turística cascada. La chica, Anneka Brading, sacó su cámara GoPro para grabarse junto a dos amigos en las Cataratas MacKenzie, en el Parque Nacional de Grampians, al oeste de Melbourne, Australia, el pasado sábado.
Sin embargo, momentos después, un hombre de 28 años de edad se resbaló desde una superficie elevada cayendo al agua; a pesar de que sus amigos intentaron salvarlo desesperadamente, el individuo de origen taiwanés acabó ahogándose. Después de examinar las fotografías de su GoPro, Anneka descubrió que vídeo-selfie también había capturado el momento en que el hombre cayó al agua y se ahogó detrás de ella. Estamos seguros de que tuvo que ser una desagradable sorpresa para ella; estar presente en la muerte de una persona justo cuando menos lo esperaba…
En la grabación, se puede ver a un grupo de personas subidas a las rocas más cercanas a la cascada tratando de rescatar al hombre frenéticamente. Por desgracia, todo fue en vano; su cuerpo no pudo ser recuperado hasta las 9.30 de la mañana del día siguiente. La joven, de tan solo 24 años de edad, dijo haber escuchado a sus amigos gritar y señalar un punto en el agua. “En ese momento no teníamos idea de lo que estaba pasando. Pensamos que se trataba de algún animal. No podíamos entender la situación, pero seguían gritando y señalando”, dijo Anneka a The Stawell Times.
La chica continuó diciendo que no fue hasta que una amiga del hombre agarró el palo de su cámara GoPro cuando se dio cuenta realmente de que alguien se estaba ahogando. Luego intentaron llamar a las autoridades con sus teléfonos. “Salí del agua corriendo e intenté llamar al servicio de emergencias, preguntándoles a todos si tenían cobertura. Ninguna persona pudo llamar”, dijo Anneka. “Absolutamente nadie de los que estábamos allí sabíamos qué hacer, y no podíamos entender a los amigos del hombre. Me temblaban las piernas cuando supe lo que estaba pasando, pero nadie sabía cómo ayudar”
Aproximadamente 40 personas se encontraban visitando la cascada en ese momento, incluido un socorrista fuera de servicio que saltó al agua para intentar ayudar, pero la presión de la cascada era demasiado fuerte. Anneka, que dijo que no vio ningún letrero donde pusiera “prohibido nadar”
Pese a que Anneka Bading se encontraba grabando un vídeo con su cámara GoPro, solamente decidió publicar una de las fotografías en las que aparece el suceso, con el resto de personas que aparece en la misma mostrándose alarmadas con respecto a lo sucedido. Con ello, la chica busca que la noticia se extienda lo máximo posible para concienciar a las personas a tener muchísimo cuidado cuando acudan a un lugar como este, sobre todo cuando existe riesgo de ahogamiento. Además, quiere intentar que los medios pertinentes se hagan cargo de aumentar la cobertura en el lugar, pese a que se trata de un paraje natural ciertamente aislado.
Recordemos que las cataratas MacKenzie son unas de las más grandes y espectaculares de todo el país, destacando sobre todo sus enormes desfiladeros y acantilados. Por favor, si acudes a un lugar natural de este tipo, intenta evitar por completo arrojarte al agua desde rocas elevadas u otras superficies, ya que, al estar mojadas, podrías resbalarte y caer sobre otra roca y morir o ahogarte, tal como le ha pasado a este hombre. Está bien el hecho de querer grabar vídeos espectaculares o hacer fotos hermosas, pero arriesgar la vida de una manera tan estúpida no vale la pena
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